Blogia
Kiribati

El Deseo

El Deseo El deseo es el factor inexplicable. El factor subrepticio.
Imparable e inaudito, como una riada de glóbulos rojos en una calle cualquiera de una ciudad cualquiera.
El deseo es una sala de espera donde el tiempo, invariablemente, se dilata en exceso.
Es un vaso comunicante con el otro: con el Otro. El Otro. Él.
Y el tirón de una mano de gigante que se ha metido en tus entrañas haciendo caso omiso a tus protestas.
Y un severo repaso a todo aquello que diste por bueno sin fundamento alguno.
El deseo te hace correr con la mente detenida en un punto brillante.
Te hace cavar zanjas a toda prisa, antes de que florezcan los rosales.
Antes de que irrumpa la angustia y empiece a ajar los pétalos.
Los glóbulos, la espera, el otro, tus entrañas, aquel punto brillante, los pétalos, la angustia... El Otro. Él.

(Imagen: Luis Martín Duque, Desnudo Masculino)

9 comentarios

Ana* -

Si, eso vino luego :P

Pero no sé si valió la pena tanto trabajo...

Kiri -

No hay que ponerse modelitos, te los tienes que quitar. Ya verás cómo se fija el macizo del gimnasio, jaja.

Ana* -

Lo de cavar zanjas a toda prisa antes de que florezcan los rosales me suena, si... es como lo de ponerte a régimen y comprarte modelitos aunque sea dudoso que el macizo del gimnasio se fije en una, ¿no? :P
Qué tiempos. Qué bochorno.
Por lo de la meteorología, lo digo.

Kiri -

Vivir las propias emociones con la atención y el gusto que éstas se merecen, suele modificar muchas ideas que dábamos por buenas sin más.
El cariño es una emoción muy intensa. Y cala mucho más que el deseo. El deseo es como una lluvia torrencial y el cariño es como una llovizna suave que va mojando la tierra.

Estoy poética-meteorológica.

Es la edad y eso.

Bambolia -

Me quedó con lo de "Y un severo repaso a todo aquello que diste por bueno sin fundamento alguno". Es completamente cierto. A mí es que ahora me entran cariñitos, pero pasión, así como algo que te hace perder el norte, como que no. Es más de emoción intensa, muy intensa. ¡Es tan bonito...!

Kiri -

Pues muchas gracias, dragoncita. Tú sí que serás una chica ardiente por aquello del fuego dragonístico.

dragoncita -

Pues muy bien contao, oye.

Kiri -

Pues vale, pues gracias. Yo tampoco tengo deseos, es lo que tiene levitar desnuda, pero vamos, que me lo han contado.

Gru -

Pues sí, creo que debe ser algo así. Yo es que hace tiempo que como que no y eso. Y ya se me ha olvidado...

Me gustan las imágenes de palabras que has puesto.